domingo, 20 de septiembre de 2015

No pudimos repetir

Domingo 20 de setiembre de 2015

SCUOLA Blanca 1 - SAFA Negro 0
Cancha: Scuola
Hora: 9:00
Aquí la guardé aquel día...

No pudimos repetir la historia


No pudimos repetir aquella hazaña de Barone, que en esa misma cancha la clavó en un ángulo. En ese ángulo que marca con la pelota casi una década después. Intentó un remate en este partido pero ni siquiera le embocó al arco. Hoy, a más de 10 años de aquel partido, Barone encontró su lugar en otra posición. Hoy la rompió atajando...



De las canchas más lindas

La cancha estaba preciosa, era un billar verde que invitaba a jugar. Rápida al principio, producto del rocío tempranero que hacía que la pelota rodara levantando agua- que pronto cedió ante el tímido sol que llegó a asomar entre las nubes de un domingo no tan claro como el día anterior.

El equipo sigue corto - cortísimo- escasos 11 estoicos que seguimos manteniendo firme y dando la pelea para un equipo que debe incrementar sus filas en el corto plazo. Puntualmente estábamos; Gallego, otra vez al arco, Yolanda, Juan Pablo, Jorge y Szodo; Alvaro, Nacho, Martín y Tiriba, Javier y Barone. Afuera solo el DT, adentro estaba todo lo que teníamos y nada más.

La cancha está preciosa, invita al juego corto y por abajo. Así comenzamos y tenemos la inciativa. Tentamos con Javier que tiene un empuje que contagia, Alvaro que también trajo su magia y hasta tuvo el tanto de la apertura a no ser por el puntillazo final que le sacó el defensa. 

Estamos cerca pero no logramos la conversión. Yolanda se va arriba y Tiriba hace el relevo pero con tanta mala fortuna que una pelota que parece fácil de sacar se les complica y la pierde, cuando Juan Pablo llegaba para asistir. El centrodelantero rival que la toca larga y la cede para el delantero que entró solo por el medio y venció al Gallego. No lo merecía el rival y tampoco nosotros en contra pero los goles hay que hacerlos.

Seguimos intentando sin éxito, el partido está parejo, muy parejo y así termina el primer tiempo.

Para el segundo le pido a Cacho cambiar de posición con Tiriba y que este pase al lateral y quedarme arriba para intentar la remontada. La verdad que les pusimos ganas y tuvimos varias ocasiones para desnivelar. A los pocos minutos se siente Alvaro y tiene que salir. Somos 10 y los metemos contra su arco. El Gallego ya había cambiado arco con Barone (se mandó tremendas atajadas!).

Una pelota que viene por la derecha de nuestro ataque, el Gallego que la manda larga y Yolanda que pica ganando a la defensa, ingreso solo al área y el arquero que achica bien contiene el remate, el rebote me queda servido pero tan arriba que me sorprende y se va apenas por encima del travesaño. Era la ocasión para empatar, el rival no podía contenernos... no se dió.

Otra anterior también la tuve y no pude conectar de cabeza a un centro preciso de Nacho. Avisamos y los metimos en su arco por casi todo el segundo tiempo, y con un jugador menos en cancha. No parecía notarse. Es cierto que ellos tuvieron también ocasiones y allí tanto la defensa entre  Jorge y Juan Pablo o la brillante actuación de Barone, impidieron que aumentaran el tanteador.

Javier lo tuvo en dos ocasiones, una que se le fue ancho el remate, y varias más que metió y empujó sin poder concretar. Tuvimos buen manejo de pelota con paredes por el sector derecho del ataque en el circuito creado con Yolanda, Martín y Javier, alternando con el Gallego otras veces,

La verdad que me encantó vernos enchufados y metiendo como si tuviéramos todo el plantel en cancha. Cuando la adversidad nos enfrenta, le damos pelea y vendemos caro cualquier partido, Eso nos genera sentimientos que hacía tiempo no disfrutábamos tanto, y que creíamos perdidos. Recuerdo que este equipo nació corto y fue nuestro mejor momento... claro, teníamos más de una década menos de primaveras encima, Pero la vida parece habernos dado una segunda oportunidad para que saquemos lo mejor de nosotros mismos y así debemos sentirlo, así debemos asimilarlo, así debemos disfrutarlo,

Hoy me sentí orgulloso de tenerlos como compañeros de grupo, mordiendo cada pelota y vendiendo cara la derrota. Hoy el rival sintió que le ganó a un equipo aguerrido, y que se hizo respetar aún en la adversidad de no tener completa su escuadra durante casi todo un tiempo. Hoy el SAFA Negro se hizo respetar. Salú.

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